La Identidad Cultural Ibérica y el Reconocimiento del Movimiento Iberista
Se habla mucho, demasiado, de identidades, como
consecuencia del fervor nacionalista y consiguiente independentismo de una
parte de la población Catalana.
Que existe una identidad cultural catalana es algo
reconocido y promovido por el poder Constituido del Estado Español desde
la Constitución de 1978, también se
reconoce desde la pertenencia a la Unión Europea la vocación europeísta y por
tanto la “ identidad Europea” del pueblo español. Otras identidades son
reconocidas y promocionadas, la de cada Comunidad Autónoma, las de las
diferentes comarcas, regiones, ciudades y pueblos, y ello se hace desde las
diferentes instituciones. Todas esas instituciones cuentan con sus
presupuestos, sus recursos, y realizan todo tipo de actividades .
¿Pero y la Identidad cultural Ibérica?
. Es necesario
recordar que la península, es una realidad cultural , histórica, y obviamente
geográfica, perfectamente reconocible. Los pueblos peninsulares
secularmente han mostrado rasgos específicos, en la época prerromana una
diversidad de pueblos , próximos entre sí,
poblaron los valles , sin las “ fronteras “ que el medievo empezó a
levantar. Posteriormente la Romanización durante 4 siglos unificó en buena medida la amalgama inicial.
Después los pueblos visigodos llegaron a establecer un Reino para toda la
península y adoptaron el Cristianismo. Más tarde la invasión musulmana y
posterior Reconquista supusieron un hecho diferencial con el resto de Europa.
Los Reinos Peninsulares de la Edad Media, fueron creando las especificidades
culturales en las diferentes áreas geográficas de la península, a la vez que como
en el resto de Europa, se generaban uniones entre reinos , para ir estableciendo
Reinos de una dimensión adecuada para el desarrollo económico y el
establecimiento de un poder capaz de enfrentar invasiones de otros Reinos.
Llegado el final de la Edad Media y al comenzar la
Edad Moderna ,la Unión Ibérica se completó en una monarquía, compuesta
principalmente por los Reinos de Aragón , Castilla , Navarra y Portugal. Los
avatares históricos posteriores, llevaron a una división política de la
Península en dos Estados, España, donde quedaron los Reinos de
Aragón, Castilla y Navarra, y Portugal, compuesta por el Reino de Portugal y
sus colonias.
Ya en el siglo XIX , con el advenimiento de las ideas
nacionales, los Reinos de la Península comenzaron su transformación a Estados
Nación y fueron conformándose las Naciones Española y Portuguesa, pero además en ese
Siglo surgió nítidamente la casi
hoy olvidada idea nacional ibérica, que hoy reivindicamos. También surgieron ideas
nacionales , principalmente ,en Cataluña, País Vasco ,y Galicia, tan de
actualidad en estos días
La historia , vemos , es larga e interpretable, pero la evidencia de la
Existencia de Iberia es incuestionable. Sin embargo esta realidad y esta
historia no se explican en las escuelas , ni tiene institución , ni presupuesto
que la sostenga y ponga en valor. Es una identidad clara, diáfana,
secular, positiva , hermosa diría yo , pero que se encuentra en desamparo.
En general se habla casi siempre de España y Portugal ,
pues son los dos estados con poder y reconocimiento internacional, y sus relaciones son entendidas , y tienen el
mismo marco institucional , de las que pueden tener España con
Letonia, o Portugal con Corea del Sur.
Sin embargo , desde hace una década, recomenzó a oírse
la idea iberista , un premio nobel, un ministro, encuestas, artículos en la
prensa, hicieron ruido y además hace 5 años nacieron organizaciones dispuestas
a “ dar la cara “ y proponer medidas para avanzar en una vinculación más
estrecha de los Estados Ibéricos ( España, Portugal y Andorra )
A día de hoy cuatro organizaciones iberistas funcionan en la Península, el
Movimento Partido Ibérico, el Partido Ibérico-Iber, y las Plataformas por la
Federación Ibérica , una en España y otra en Portugal.
Estas organizaciones, han realizado múltiples
actividades teniendo como propuesta política la establecida en la Declaración de Lisboa, donde se sientan las bases para la estructuración Confederal de
Iberia.
Con esta propuesta política confederal
,se pretende dar un paso en la dirección de establecer una unidad de acción
política de Iberia, a la vez que se subraya que esa unidad se hace desde el
reconocimiento el de la diversidad como
un valor esencial del Movimiento Iberista.
El movimiento Iberista precisa de una visibilidad pública, pues su
casi invisibilidad supone un “ déficit democrático “ inaceptable en Democracias
modernas. Los medios de comunicación y las instituciones democráticas de ambos
países deben de atender a este reclamo.Decimos esto porque tenemos la certeza
de que los poderes formales y fácticos conocen del trabajo del Movimiento
Iberista , y también sabemos que en buena medida lo ignoran .
El Moderno Movimiento
Iberista ha dado muestras de seriedad , solvencia, responsabilidad y obviamente
sometimiento a la legalidad, merece, merecemos un impulso por parte de los
poderes democráticos de la sociedad.
Pablo Castro Abad
Presidente de la Plataforma por la Federación Ibérica en España.